En el caso de un neumático, ocurre exactamente lo mismo. Nos informa del fabricante, del tipo de neumático, de su homologación para carretera, hielo o nieve, de sus medidas, de la medida de la llanta, de la fecha de su fabricación, de la velocidad máxima a la que puede circular el neumático, y mucha más información de carácter técnico.
Probablemente los tres datos más importantes son, las medidas del neumático, la velocidad máxima admisible, y la fecha de fabricación del neumático.
Cuando por ejemplo vemos en un neumático esto: 165/70 R13, nos está informando que el neumático tiene una anchura de 165 mm., que la altura desde la llanta hasta el borde del neumático, es el 70% de esa anchura (165 mm. x 70% = 115,5 mm.), y que solo puede montarse en una llanta de 13 pulgadas.
La velocidad máxima admisible viene indicada en el neumático a través de una letra, y esta es la tabla para que asociemos esa letra con la velocidad máxima a la que podemos circular con ese neumático:
K = 110 km/h.
L = 120 km/h.
M = 130 km/h.
N = 140 km/h.
P = 150 km/h.
Q = 160 km/h.
R = 170 km/h.
S = 180 km/h.
T = 190 km/h.
H = 210 km/h.
V = 240 km/h.
W = 270 km/h.
Y-Z = 300 km/h.
Respecto a la fecha de fabricación del neumático, deberemos buscar un código numérico formado por tres o incluso 4 caracteres, donde los dos primeros dígitos nos informarán del nº de la semana de fabricación (recordemos que el año tiene 52 semanas), y el resto de dígitos, del año de fabricación. Por ejemplo, si vemos que un neumático tiene estos dígitos: 139, podemos concluir que el neumático ha sido fabricado en la semana 13 (aproximadamente, la última semana de marzo) del año 2009 (de ahí el 9).
Es muy importante fijarse en esta fecha de fabricación, cuando vayamos a cambiar los neumáticos, para que no nos den gato por liebre, y nos monten unos neumáticos que tienen ya uno o dos años, y que han estado almacenados desde entonces en el taller de montaje. Lo ideal es pedirle al taller que nos monte unos neumáticos con una fecha de fabricación reciente (lo ideal sería que los neumáticos tuvieran como máximo 5 o 6 meses).
Si vamos a adquirir un vehículo de segunda mano, nos fijaremos también en la fecha de fabricación de los neumáticos, para saber si debemos cambiarlos o no en breve, porque es bastante habitual encontrarse con neumáticos en los que a partir de los 5 años desde su fecha de fabricación, éstos suelen cristalizarse, perdiendo consistencia, mostrándose durísimos al tacto, y lo que es más importante, perdiendo agarre y efectividad, pudiéndose convertir incluso en peligroso, conducir un vehículo con esos neumáticos.
Aquí os dejo una ilustración de la información que nos aporta un neumático (para verlo ampliado, o imprimir esa información, haced clic sobre la imagen):
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